Bonjour à tous!
La temporada de bodas no ha terminado y no lo hará hasta finales de octubre. Cada año hay más bodas en estos dos meses porque el calor llega más tarde. Antes, el buen tiempo llegaba a finales de mayo y acababa de agosto, pero ya, hasta julio no hace bueno y, claro, hasta noviembre no hace frío. Lo único es que ahora empieza a refrescar por las noches y se agradece llevar un vestido de invitada de manga larga.
Estáis acostumbrados a que lleve tacones, pero este look lo completan estas sandalias de pedrería de Estefanía Marco de otra temporada con un tacón de solo 5 centímetros, de lo más cómodas. Y, el clutch es de Blanco, de piel. Imaginad los años que tiene, que Blanco ya ni existe, jaja, pero son los típicos bolso que solo usas para ocasiones especiales y que están como nuevos.
El día de ayer al final fue mejor de lo que esperaba. Pablo cada día duerme mejor y eso ayuda mucho para poder sobrellevar la jornada laboral. Ojalá siga así... Por cierto, ya le está saliendo su primer diente y ni fiebre ni nada, ¡un machote!
Vestido: Novashe (s/s 2018)
Clutch: Blanco (old)
Sandalias: Estefanía Marco (old)
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